Confundir los términos de piel seca y deshidratada para pensar que ambas aplican y se refieren a lo mismo es bastante fácil, ya que la verdad es que suenan bastante parecidas. Sin embargo, esto no es así y entender las diferencias será importante para la salud de tu piel.
En términos básicos, la piel seca es un tipo de piel y se presenta como una condición permanente debido a la composición de la barrera encargada de retener el agua de tu piel, mientras que la piel deshidratada es una condición que puede presentarse en todos los tipos de piel y que a cualquiera, incluso a las personas de piel mixta o grasa, les puede afectar.
¿Qué mantiene a la piel hidratada?
La superficie de la piel está protegida por una pared natural hidrolipídica (también llamado manto hidrolipídico) que está formada principalmente por agua y lípidos (sebo). La función de esta barrera es defender a la piel de las agresiones naturales y prevenir la pérdida de agua. En el caso de la piel seca, esta produce menos sebo que la piel normal, lo que se traduce en una falta del aceite natural impidiendo que este pueda mantener la humedad necesaria para la piel. Como ves, es una condición permanente del manto hidrolipídico de la piel.
Por otro lado, la piel deshidratada se manifiesta al no tener suficiente agua y comúnmente es causada por factores externos, como el clima, el medio ambiente, la dieta y el consumo de cafeína, lo que puede reducir el contenido de agua dentro de la piel. Como mencionamos anteriormente, cualquier persona – independiente de su tipo de piel- puede presentar una piel deshidratada.
¿Cúal es la apariencia de una piel seca versus una deshidratada?
Normalmente, la piel seca no severa presenta un aspecto pálido y desvitalizado, descamación, agrietamiento y pérdida de elasticidad. Se siente incómoda, tirante y puede provocar picazón. Por otro lado, la piel deshidratada, se siente apretada, opaca y quizás haga más notorias las arrugas y líneas de expresión. La piel deshidratada se presenta como una condición no común en tu piel, sino más bien como algo transitorio.
¿Qué hacer si tengo la piel seca?
La piel seca se ve beneficiada por diversos ingredientes y activos que pueden restablecer su falta de lípidos. Elegir los productos adecuados, más una buena nutrición y una abundante ingesta de agua te ayudará a mantener tu piel en su mejor versión. Sin embargo, si notas exagerada incomodidad o severa sequedad en tu rostro, te recomendamos visitar a tu dermatólogo para un diagnóstico personalizado de tu caso, ya que existen diagnósticos clínicos más severos y patologías cutáneas que se pueden producir en las pieles secas que necesitan tratamientos especiales.
¿Qué hacer si tengo la piel deshidratada?
Si has sentido tu piel deshidratada, lo principal es determinar y entender qué factor externo podría haber provocado que tu piel perdiera agua. ¿El cambio de clima? ¿Quizás has cambiado tu rutina de alimentación por una con menos nutritiva? ¿O no estás tomando suficiente agua? Una vez que hayas entendido qué provocó esta condición en tu piel, lo más simple y eficaz es intentar cambiar estos factores y exponerse menos a ellos. Además, puedes complementar esto con una rutina de cuidado para que tu piel sienta que la hidratación (y el agua) vuelve otra vez.
¿Qué funciona mejor para la piel seca y la deshidratada?
Te dejamos una lista de ingredientes naturales y activos que puedes buscar en tus productos o agregar en tus rutinas de cuidado dependiendo del estado de tu piel. De todas maneras, asegúrate de no presentar alergias o sensibilidades a ellos.
| Ingrediente | ¿Recomendado para piel seca ó deshidratada? |
| Ácido Hialurónico | Ambas, asegúrate que este ingrediente esté en tu crema hidratante o sérum |
| Glicerina | Deshidratada |
| Aloé Vera | Deshidratada |
| Miel | Deshidratada |
| Aceites (almendra, oliva, coco) | Seca |
| Ceramidas | Ambas. Las ceramidas fortalecen la barrera de la piel para ayudar a prevenir la pérdida de humedad. |
| Manteca de Karité | Seca |
