Para las personas con piel mixta, el cuidado de la piel puede ser todo un desafío, porque como su nombre lo indica, la piel del rostro puede presentar distintos tipos de texturas y, por lo tanto, resulta un poco más complejo encontrar los productos adecuados y la rutina indicada para mantenerla con una apariencia saludable ¿Te pasa? Hoy te ayudaremos a descubrir la mejor manera de cuidar este tipo de piel.
¿Cómo saber si tengo la piel mixta?
La piel mixta es un tipo de piel que presenta una combinación de dos tipos: seca y grasa, siendo la “zona T” – conformada por la frente, la nariz y el mentón- la parte del rostro de apariencia más grasa y que presenta brillo y poros dilatados, mientras que la zona de las mejillas y los ojos tiende a resecarse.
Es posible que las personas con piel mixta puedan distinguir en su rostro líneas finas de expresión y arrugas (una expresión muy común en la piel seca) así como también brillo, tono desigual y poros grandes en el sector de la nariz (factores que se presentan en la piel grasa). Normalmente, las personas con este tipo de piel, sólo sienten la necesidad de hidratar sus mejillas después de lavarse la cara.
¿Qué causa la piel mixta?
La condición de la piel se atribuye principalmente a los factores genéticos heredados. Así como heredas el color de tus ojos, cabello y hasta la forma de tu cuerpo, también puedes heredar tu tipo de piel. Es la genética entonces la que provoca que las pieles mixtas presenten glándulas sebáceas más activas en la zona T, mientras que en las mejillas éstas se encuentren con una actividad considerablemente inferior.
¿Cómo puedo cuidar mi piel mixta?
A continuación, te presentamos algunos pasos y productos que podrías considerar en tu rutina de cuidado para mantener tu piel saludable. ¡Lo más importante es elegir los adecuados para tu tipo de piel siempre!
1. Limpiadores
Al igual que en los otros tipos de piel, el primer paso base para tu rutina es la limpieza de piel. Para efectos de tu piel mixta, te recomendamos hacer una doble limpieza. ¿Has escuchado sobre esto? Consiste en dos pasos
· Paso 1: Quita el maquillaje con un limpiador a base de aceite. ¡Sí! Aunque no lo creas, los limpiadores de aceite son excelentes para eliminar el maquillaje tanto de tu rostro como el de los ojos, incluso si es maquillaje a prueba de agua. Evita el uso de toallitas desmaquillantes, ya que corres el riesgo de secar las partes menos grasas de tu piel.
· Paso 2: Una vez que te quites el maquillaje, limpia nuevamente con un segundo limpiador suave. Es importante que sea de pH equilibrado y, por supuesto, indicado para piel mixta, así removerás las impurezas que quedan en la piel. A veces, las personas tienden a pensar que se necesitan limpiadores potentes y abrasivos para remover la grasa, pero eso no es así. ¡Evítalos! Puedes incluso provocar el efecto contrario y hacer que tu piel libere aún más grasa o que incluso otras zonas se resequen al extremo. ¡Recuerda que buscamos limpiar reteniendo la humedad profunda de tu rostro!
2. Tónicos.
¿Has escuchado hablar de ellos? Los tónicos son productos dermatológicos en formato líquido que son excelentes equilibrando tu piel y preparándola para los siguientes pasos de tu rutina. Pueden hacer una increíble diferencia. Además, ayudan a eliminar las impurezas de la piel, apretar los poros e hidratar. Te recomendamos buscar un tónico indicado para tu tipo de piel, así lograrás disminuir tu piel grasa mientras hidratas las zonas secas.
3. Crema Hidratante
Las cremas hidratantes son muy importantes. Protegen “la acción” de todos los pasos anteriores en tu rutina y ayudan a mantener tu piel hidratada. Si tienes la piel mixta, debes asegurarte de que estés usando una crema hidratante ligera, que hidrata las áreas secas pero no obstruye las áreas grasas. Ideal si se absorbe rápidamente, así lograrás un acabado mate para que no se vea demasiado grasosa.
4. Mascarilla Combinada
Como paso extra, y una vez por semana, puedes aplicarte mascarillas para el rostro. Son una gran herramienta para cuidar tu piel, ya que contienen activos que dan resultados rápidos. En el caso de la piel mixta, una opción sería el uso de mascarilla múltiple. ¿Qué quiere decir? Es utilizar mascarillas de diversos ingredientes y activos en las distintas zonas de tu rostro. Por ejemplo, una mascarilla de arcilla sería de gran ayuda en todas las áreas grasas (osas), como la frente, tu nariz y mentón, mientras que puedes usar una mascarilla hidratante en la zona de las mejillas, si es que están secas, para darles toda la hidratación que necesitan.
