Una piel llena de vida e iluminada no es resultado de usar productos o tratamientos únicamente, sino de cómo cuidas y nutres tu cuerpo desde adentro. Tu piel siempre revelará la manera en que te alimentas y el estilo de vida que llevas. No importa todos los productos que incorpores a tu rutina, nada reemplaza los beneficios de una buena nutrición. Hoy, te mostramos 6 consejos para nutrir tu organismo y tener una piel bella y sana desde adentro hacia afuera.
- Tu piel es el órgano más grande del cuerpo.
¿Lo sabías? La piel es un órgano, por lo que su composición celular, salud y mantenimiento dependerá de los nutrientes disponibles en tu organismo. De hecho, cuando tu cuerpo se alimenta de una manera variada y equilibrada, estás dándole un suministro para activar el crecimiento de nuevas células al eliminar las viejas, logrando que tu piel se vea mucho más suave, rellena y con vitalidad.
- Incorpora a tu dieta un arcoiris de frutas y verduras.
Nada mejor que asesorarte con una nutricionista a la hora de tomar nuevos desafíos nutritivos. Sin embargo, te adelantamos que el mayor poder antioxidante se encuentra en la misma fuente de la naturaleza. Incorpora frutas y verduras de todos los colores y protegerás tu piel de los efectos oxidativos y del envejecimiento que provocan los radicales libres emitidos por luz solar, la contaminación, el estrés y el tabaquismo. ¡No olvides consumir al menos 5 porciones diarias!
- Ingiere tu vitamina C.
¿Quieres sanar las imperfecciones desde adentro? La vitamina C es un excelente antioxidante que apoya el sistema inmunológico y promueve una piel radiante y libre de imperfecciones ya que es parte del proceso de producción de colágeno e irrigación sanguínea. Puedes encontrar esta vitamina en kiwis, naranjas, papaya, brócoli y arándanos.
- ¿Cuánta agua estás tomando?
Puede que ya estés al tanto de este consejo, pero la hidratación es realmente importante para ver cambios serios en tu piel. Cuando estás deshidratada, tu piel se ve seca, cansada y hasta ligeramente gris. Haz el hábito de tomar 6 a 8 vasos al día y verás enormes diferencias: de una piel opaca a una piel que resplandece. También debes saber que hay alimentos que aportan hidratación como la sandía, el pepino y los zapallos italianos. Te aconsejamos evitar fumar y consumir alcohol en exceso, ya que ambos provocan el envejecimiento de la piel.
- Agrega grasas saludables y Omega-3 .
El mito de que todas las grasas son malas, nos ayudará a entender que la piel y tu cuerpo necesita de ellas. Las grasas del tipo monoinsaturadas y poliinsaturadas se encuentran en la palta, pescados, nueces y otras semillas, y actúan como un humectante natural para tu piel manteniéndola flexible. Por otro lado, los ácidos grasos como el Omega-3 potencian la producción de compuestos antiinflamatorios. Éstos ácidos los puedes obtener del pescado, la linaza o la chía previniendo irritaciones y eccemas.
- Elige carbohidratos bajos en azúcar.
Se ha comprobado que las personas con una dieta de carbohidratos altos en azúcar, aumentan la insulina, pudiendo dañar el colágeno de la piel y acelerar la aparición de arrugas. Elige carbohidratos que liberen azúcar gradualmente, que proporcionen un suministro constante de azúcar y que te hagan sentir satisfecha por más tiempo.
